En los últimos tiempos no dejamos de recibir información sobre lo perjudicial que es para conciliar el sueño el uso de los dispositivos móviles, especialmente en las horas previas a la hora de irnos a dormir.
La recomendación general para mejorar la calidad del sueño es alejarse de las pantallas digitales porque la luz que emiten dificulta el estado adecuado para dormir. La luz de las pantallas influye en los niveles de melatonina alterando considerablemente su equilibrio.
A su vez, la melatonina es responsable del tiempo que dedicamos de manera natural a dormir y a despertarnos, configurando así en parte el ritmo circadiano de cada persona de manera individual.
El impacto sobre la salud de las luces de pantallas, lámparas o leds puede resultar muy perjudicial en horario nocturno. No solamente puede resultar nocivo por su capacidad de alterar el ciclo de sueño y vigilia, sino también porque puede resultar perjudicial para la vista.
Al resultar expuesto a la luz el cuerpo deja de producir melatonina, al asociar la luz con el período diurno, y entorpece así el ciclo natural del sueño presente en cada persona. Dificulta además el descanso profundo al excitar en cierto modo los sentidos, en este caso a nivel ocular. A mayor intensidad lumínica se produce una mayor probabilidad de alteración del ciclo de sueño.
Los filtros que se publicitan para neutralizar la luz azul de los dispositivos digitales alteran igualmente este ciclo. En general las luces de las pantallas electrónicas no ayudan a la hora de conciliar el sueño, al alejarnos del ambiente tenue y tranquilo que se asocia a la hora de dormir.
La realidad es que actualmente no hay demostración científica sobre el hecho de que estos filtros protegen del perjuicio de la luz azul para la vista, deteriorando la retina y la mácula ocular. Sí que es cierto que en parte el abuso de la luz artificial puede desgastar la vista y conllevar alguna complicación, sin embargo, el aspecto que más perjudica de la luz azul en horario nocturno es la alteración de los ritmos circadianos.