El síndrome de piernas inquietas (SPI), también llamado enfermedad de Willis Ekbom, provoca sensaciones incómodas en las piernas, como picazón, hormigueo o tirones.
Estas sensaciones crean una necesidad imperiosa de mover las piernas. Se describió por primera vez en los años 40 del siglo pasado, pero solo los últimos 20 años se ha investigado con mayor atención. Las personas con SPI pueden caminar, estirarse o sacudir las piernas para lograr aliviar las molestias; sin embargo, los síntomas tienden a empeorar cuando se está inactivo, incluso cuando nos relajamos o acostamos. Como resultado, los síntomas del SPI a menudo interrumpen el sueño en el 60%-90% de los casos.
En casos particulares, el SPI se debe a una lesión de los nervios periféricos, debido a la disminución de los acúmulos de hierro o por el aumento del ácido úrico en la sangre. No obstante, en la mayor parte de los pacientes no se evidencia una causa específica del síndrome de piernas inquietas, por lo que se define como idiopático.
En estos casos, puede existir un componente de predisposición genética, ya que al menos una tercera parte de los pacientes tiene antecedentes familiares. Por ello, se cree que el origen de este síndrome guarda relación con una alteración en la regulación de la dopamina, que es uno de los neurotransmisores responsables de la correcta coordinación de movimientos musculares.
Según la Clasificación Internacional de Trastornos del Sueño, la descripción más utilizada por los pacientes con SPI para describir las sensaciones son:
Hormigueo, Quemazón, Tirones, Dolor, Picor, Palpitaciones
Algunas personas pueden percibir estas sensaciones como incómodas, aunque para otros pueden llegar a causar dolor. La sintomatología puede variar entre leve y severa y pueden aparecer ocasionalmente o todas las noches, con periodos de remisión que pueden durar algunas semanas. Es importante tener en cuenta que el SPI puede variar entre géneros, ya que los varones sufren de movimientos periódicos y las mujeres suelen experimentar síntomas sensoriales.
Si crees que sufres de SPI, debes consultar con un médico especialista del sueño para recibir un diagnóstico y tratamiento. A menudo, se suele prescribir una polisomnografía para poder descartar otros trastornos del sueño subyacentes y explorar la presencia de SPI. Además, se suelen analizar otros valores para descartar cualquier exacerbación de los síntomas como, por ejemplo, la anemia por deficiencia de hierro, una insuficiencia renal o el embarazo.
Tengo piernas inquietas? Clacula tu Índice Internacional de Gravedad del SPI (IRLS)
Estas preguntas están diseñadas para ayudar a evaluar la frecuencia, intensidad y el impacto funcional de los síntomas del SPI en la vida diaria del paciente. La puntuación total se calcula sumando las respuestas a estas preguntas, lo que proporciona una medida de la gravedad general del SPI en ese individuo.
¿Con qué frecuencia siente la necesidad de mover las piernas debido a sensaciones desagradables?
Nunca: 0 puntos
A veces (1-2 veces al mes): 1 punto
Ocasionalmente (1-2 veces a la semana): 2 puntos
Frecuentemente (3-4 veces a la semana): 3 puntos
Muy frecuentemente (5-7 veces a la semana): 4 puntos
¿Qué tan intensas son las sensaciones desagradables en sus piernas?
Leves: 1 punto
Moderadas: 2 puntos
Severas: 3 puntos
Muy severas: 4 puntos
¿Qué tan graves son sus síntomas en comparación con los últimos días?
Mucho menos grave: 0 puntos
Menos grave: 1 punto
Igual de grave: 2 puntos
Más grave: 3 puntos
Mucho más grave: 4 puntos
¿Qué tan graves son sus síntomas en comparación con su peor momento?
Ningún cambio: 0 puntos
Ligeramente menos grave: 1 punto
Ligeramente más grave: 2 puntos
Moderadamente más grave: 3 puntos
Muy significativamente más grave: 4 puntos
¿Con qué frecuencia sus síntomas interfieren con su capacidad para dormir?
Nunca: 0 puntos
A veces (1-2 veces al mes): 1 punto
Ocasionalmente (1-2 veces a la semana): 2 puntos
Frecuentemente (3-4 veces a la semana): 3 puntos
Muy frecuentemente (5-7 veces a la semana): 4 puntos
¿Qué tan perturbado está su sueño debido a sus síntomas?
No perturbado: 0 puntos
Ligeramente perturbado: 1 punto
Moderadamente perturbado: 2 puntos
Bastante perturbado: 3 puntos
Muy perturbado: 4 puntos
¿Cuál es su nivel de incomodidad debido a los síntomas al despertar durante la noche?
Ninguna incomodidad: 0 puntos
Ligeramente incómodo: 1 punto
Moderadamente incómodo: 2 puntos
Bastante incómodo: 3 puntos
Muy incómodo: 4 puntos
¿En qué medida sus síntomas interfieren con su vida diaria (por ejemplo, trabajo, actividades sociales)?
Ninguna interferencia: 0 puntos
Ligera interferencia: 1 punto
Moderada interferencia: 2 puntos
Interferencia significativa: 3 puntos
Interferencia extrema: 4 puntos
¿Qué tan molestos son sus síntomas cuando está en reposo o inactivo?
No son molestos: 0 puntos
Ligeramente molestos: 1 punto
Moderadamente molestos: 2 puntos
Bastante molestos: 3 puntos
Muy molestos: 4 puntos
¿Cómo describiría el impacto general de sus síntomas en su calidad de vida?
Sin impacto: 0 puntos
Impacto leve: 1 punto
Impacto moderado: 2 puntos
Impacto grave: 3 puntos
Impacto muy grave: 4 puntos
RESULTADOS:
0 a 10: Los síntomas son leves.
11 a 20: Los síntomas son moderados.
21 a 30: Los síntomas son graves.
31 a 40: Los síntomas son muy graves.
En caso de que te haya salido mas de 20, deberiamos hacerte una polisomnografia con ingreso o ambulatoria.