El Madrid de Benito Floro fue de los primeros equipos en trabajar la parte mental del juego con un psicólogo deportivo; la prensa encontró un tirón mediático en esa figura , los conceptos de la ansiedad , la depresión , el psicoanálisis relacionados con el fútbol daban mucho morbo, así que empezó una campaña de desinformación continua de los medios de comunicación hacia esa figura enigmática, sin interesarse realmente por cuál era su trabajo real, muy lejos del diván y de la bata blanca, acompañando al entrenador en la gestión de grupos , mejorando su comunicación y optimizando las habilidades psicológicas de los jugadores.
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Esta imagen no ayudó a que los clubs , entrenadores y jugadores aceptaran la figura del psicólogo en el mundo del fútbol… “yo no estoy loco”, “yo no tengo problemas”, “ a este ponle la cabeza en su sitio”, “ este necesita un psiquiatra”, …son los comentarios que nos encontramos cuando nos acercamos al campo de entrenamiento…
Muchos psicólogos deportivos optaron por esconder su credencial de psicólogo y poner otra de fisioterapeuta, auxiliar… para no atraer la atención de los medios y ver perjudicado su trabajo.
Hace años cuando entramos a trabajar en los clubs nos encontramos que la parte psicológica ya la ocupaban otras figuras estrambóticas como magos, gurús y curanderos de todo tipo, el fútbol en España está a años de otros deportes donde el trabajo es más metódico y serio. Hoy en día los personajes que rodean la parte mental del fútbol, ya no son tan exóticos, aparecen con nombres que les da más credibilidad como “coaches” “preparadores mentales”…
Además, la especialización en psicología del deporte, de rango universitario, le prepara para ejercer otras funciones no tan conocidos, pero no menos importantes, tales como: enseñanza de habilidades mentales para jóvenes deportistas (niños, niñas, jóvenes…), en colegios y escuelas deportivas; asesoramiento de gestores y directivos; asesoramiento en programas de deporte inclusivo (deporte de integración, deporte adaptado, etc.); actividad deportiva para problemas de salud y tercera edad; rehabilitación de lesiones (aspecto mental); etc.
La Asociación Catalana de la Psicología del Deporte (ACPE) y los psicólogos deportivos Oriol Mercadé, Jordi Segura, Albert Soldevilla, Raquel del Aliga y Vicenç Raluy nos explican su trabajo en 10 puntos clave que el 13.05 de 2016 fueron publicados en el periódico deportivo MARCA.
- No hacemos terapia., ni tenemos Divan Entrenamos la parte psicológica del deporte. La psicología deportiva es una especialización que se orienta a optimizar el rendimiento, no a tratar patologias como la psicología clínica. Por eso un deportista debería trabajar con un psicólogo especializado en el deporte y no un psicólogo clínico o con otra especialización diferente.
- Estigmatización de los medios de comunicación. La información que a veces han dado los medios de comunicación de la psicología deportiva ha desinformado más que informado ya que no se ajusta a la realidad. Aunque contradictoriamente, muchos titulares hacen referencia a aspectos psicológicos de los deportistas.
- Trabajamos en el campo no en el Diván . La palabra Divan és la más recurrente en los periódicos deportivos . “tal jugador pasa por el Divan…”. Nuestro Divan es el campo de juego, los entrenamientos , no vamos con bata blanca, estimos con la equipación del resto del staff y nuestra oficina la mayoría de veces es el campo de entrenamiento. Utilitzamos herramientas de trabajo que podrian ser las mismas que los técnicos: observación de vídeos, toma de estadísticas. ,
- El psicólogo es un miembro más del cuerpo técnico que se cuida de las habilidades psicológicas de los jugadores o de la gestión que hace el entrenador, e incluso las decisiones del equipo directivo, del director deportivo, o por ejemplo dando soporte a los servicios médicos en la recuperación y prevención de lesiones,
- El psicólogo en el deporte formativo . No solo trabajamos con el equipo profesional para conseguir resultados, sobretodo lo hacemos en las edades formativas, asesorar a los entrenadores para que también sean educadores, ayudar a los padres en sus funciones como padres, favorecer la posibilidad que los deportistas se formen académicamente y ayudarles en su proceso de formación como personas tanto como la deportiva, haciendo hincapié en los valores .
- Trabajo de habilidades psicológicas. El psicólogo trabaja sobre: Estado de ánimo, Habilidades psicológicas como la concentración, ajuste de tensión, control de impulsos…) Actitud y motivación y Personalidad
- Gestión de equipos y organizaciones. El psicólogo del deporte también observa y analiza cómo se estructura el grupo (roles, subgrupos) y cómo funcionan sus dinámicas internas (clima de trabajo, ambiente social, cohesión…). para valorar si hay que optimizar alguno de estos aspectos.
- Entrenar al entrenador. El observa todo aquello que hace y dice el entrenador, dentro y fuera del campo. El entrenador ejerce de líder del grupo y el psicólogo le asesora en la toma de decisiones de la organización: detección de talentos, cantera, formación, fichajes, ruedas de prensa , gestión de conflictos en la plantilla etc. para asegurarse que ejerce un liderazgo eficiente.
- Psicología del entrenamiento. El psicólogo ayuda a optimizar los entrenamientos, introduciendo la parte psicológica a trabajar en la planificación de la temporada y en los ejercicios diarios, en relación a los aspectos mentales, como el preparador físico lo hace con los aspectos físicos. También, el entrenamiento mental de árbitros y jueces.
- Intrusismo laboral. Ahora está en auge la figura del “coach”. Un psicólogo puede, mejor que nadie, realizar las funciones de coaching , pero un “coach” no es psicólogo, por lo que no tendrá la capacidad de enfoque de la situación que, por su formación y especializaión, tiene un psicólogo deportivo